¡Abajo los órganos de la seguridad del estado! ¡Abajo los
órganos de la seguridad del estado!... iba gritando un señor, con visibles
muestras de un alto grado de intoxicación.
¡Abajo los órganos de la seguridad del estado!... gritaba
más fuerte ante la risa de quienes pasaban cerca.
¡Abajo los órganos de la seguridad del estado! ¡Carajo! Y se
vira para el lado y le dice a un grupo de personas ¿vieron, me atreví? Mis 5
pesos.
¿Qué hubiese pasado de no estar borracho el señor?
No hay comentarios:
Publicar un comentario